El peor de la historia, lejos

River dejó pasar la última y penosa oportunidad de ganar y aspirar a salir del fondo. Es que el empate 1 a 1 como visitante frente al sólido equipo de Estudiantes de La Plata, lo úbica sólo en la cola de la tabla confirmando la peor campaña de su historia y superando a la de la temporada 1983, en la cual finalizó penúltimo.

Es la primera vez que el conjunto de Núñez termina en esta posición, y sorprende aún más tenindo en cuenta que en el torneo anterior fue el campeón.

De fútbol poco y nada. Con mucha voluntad por encima de cualquier tipo de planteo futbolístico, el equipo de Gabriel Rodriguez no mostró variantes en lo colectivo y sus pobres individualidades no marcaron la diferencia. En el primer tiempo, apenas tres situaciones claras de gol pudieron haber puesto en ventaja a River, pero se le negó el gol. Estudiantes desplegó su habitual juego y no sufrió demasiado sobresaltos.
En la segunda mitad, River generó algo más, suficiente como para aprovechar una de sus cuatro oportunidades claras frente a la red. A los 10 minutos, Eduardo Tuzzio conectó de cabeza un centro que partió desde la derecha en los pies de Matías Abelairas y frente a la ineficaz atajada de Andujar pusó en ventaja a River por la mínima diferencia. Pero como es habitual y en la gran mayoría de los últimos partidos, el 'millo' no supo aguantar al rival, que a los 24 minutos consiguió la igualdad en los pies de Mauro Boselli. A poco estuvo de quedarse sin nada en el último cuarto de hora.
El fin del campeonato deja una gran bolsa de basura que Néstor Gorosito deberá limpiar de inmediato si quiere que su conducción sea exitosa y River vuelva al lugar donde merece estar. Los jugadores, quienes estuvieron de vacaciones durante todo el Apertura, también deberán autoreplantearse si están capacitados para vestir la camiseta, porque desde afuera da toda la sensación a lo contrario y dejan mucho que desear.